Su presidente, Conrado Ferber, aseguró que se trabaja para dar ese salto. También señaló que no habrá problemas para certificar el producto como lo exige la UE.
Con particular entusiasmo el presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Conrado Ferber, describe los logros de su gestión en cuanto a apertura de mercados internacionales y el proceso iniciado para consolidar el vinculo con la Unión Europea (UE) a pesar de requerimientos exigentes. Dice que el consumidor local prefiere hoy la calidad más allá del precio.
¿Qué situación tenemos hoy respecto a la carne en el Uruguay pensando en términos económicos?
– El negocio de la carne en este momento es un negocio que funciona de manera muy eficiente. Debe ser el rubro más cristalino por la cantidad de controles, entre ellos el de INAC, que tiene buen nivel de fijación de precios en carne vacuna, fundamentalmente, que es el 90% del mercado. El consumidor uruguayo tiene la regulación que permite la entrada de carne desde el exterior, que baja los precios o los regula, de acuerdo al mercado internacional. No tenemos grandes picos de precios hacia arriba, tampoco hacia abajo, tenemos una estabilidad en los precios.
Es un mercado con una potencia muy grande a nivel internacional. Es el único rubro en el que Uruguay está dentro de los primeros, entre el séptimo y noveno lugar como exportador de carne del mundo. Está bien valorado y tenemos muchísimo para crecer, no tanto en volumen, pero sí en precios. Debemos de valorar la marca Uruguay. Ese es un trabajo que se empezó a hacer en todos los mercados que tenemos, al mismo tiempo que seguimos trabajando para abrir otros.
¿Cuáles son entonces los mercados que tenemos hoy y cuales están en camino a su apertura?
–Empecemos por Sudamérica, los mercados importadores de carne que son Chile, Brasil donde tenemos posibilidades de crecimiento sobre todo en carne bovina, tenemos entrada en Colombia. América del Sur ya está. No tenemos mucho más allá de generar marca y mejorar la inserción. En el norte, le estamos vendiendo carne a todos, Estados Unidos este año es el mercado líder, el que nos ha suplantado la demanda a nivel de precios de China, que bajó los últimos dos años. Es el que más creció este año y el que paga mejor.
Europa es nuestro mercado histórico, que está abierto, pero con una cantidad de dificultades de lo ambiental, muchas regulaciones, muchas condicionantes y después tenemos Israel como algo aislado entre Europa y Asia, que este año nos habilitó la carne con hueso, tanto ovina como bovina, y “pegó un salto” en cuanto a las compras.
El norte de África y cercano oriente, está en crecimiento, está todo habilitado, tenemos Egipto, tenemos Arabia Saudita, que lo estamos desarrollando en estos últimos dos años, Ya yendo a Asia, China obviamente está abierto y es nuestro líder en cuanto a volumen con una gran caída este año, pero sigue siendo en volumen muy importante y va a seguir siendo muy importante.
El país exporta el 80% de su producción cárnica, por lo queda solo el 20% para el mercado local. ¿Qué lectura hace de eso?
– El mercado local está fuerte, antiguamente el 66% era carne vacuna y el resto era pollo, cerdo. Hoy bajó un poco la proporción de la carne vacuna, estamos en 47 kilos por año por persona y seguimos siendo consumidores importantes. Subió el pollo, subió el cerdo y estamos en 95 kilos de consumo de carne por habitante por año, son números importantes. Ha subido el consumo de carne de manera importantísima. Según una encuesta que realizamos la gente le da importancia a primero la calidad del producto, después la integridad y recién en tercer lugar le están dando importancia al precio.
Foto: Embajada de EEUU
¿En qué estatus está el Uruguay respecto a las exigencias que pone la Unión Europea para comprar nuestra producción y qué significa esa exigencia?
– Piden que todos los productos que vienen de la vaca, sea carne o cueros tengan una certificación de que son producidos en predios donde no se deforestó el monte nativo. Obviamente eso no pasa en Uruguay salvó excepciones muy chicas. Hay una ley que ya tiene 52 años que prohíbe la tala del monte nativo en Uruguay y la castiga de manera muy fuerte. Es el único país de América Latina en el que crece el monte nativo. Además, piden que esa empresa de donde viene esa carne o ese animal cumpla con las leyes laborales y económicas, es decir, que pague impuestos y que además cumpla con leyes laborales, que no haya trabajo infantil, que no haya trabajo esclavo, cosas que sabemos que en Uruguay no existen hoy, pero quieren la certificación en definitiva de que esa empresa está siendo controlada por el Ministerio de Trabajo y por el Ministerio de Economía. Toda esa información Uruguay la tiene. Lo que nos pone esto es frente a la necesidad de generar un sistema para certificar que tome la información de todos esos puntos. Es un tema más tecnológico lo que nos está demandando. La información está y vamos a tener un piso a ese nivel de información que nos permite encarar esta certificación sin costos extras para el productor, lo va a hacer el Estado.
¿Y en qué tiempos estamos para eso?
— Se está trabajando a nivel de programación. La línea del primero de enero nos exige llegar y vamos a llegar. Se va a llegar. Y, salvo que ocurra alguna cosa, no vamos a tener ningún problema con los embarques el primero de enero por falta de certificación. Será más ágil o menos ágil, más eficiente o menos eficiente el sistema, pero seguro no va a haber problema en cuanto a la certificación.
¿Cuál es, entonces, el principal desafío para lo que queda de gestión?
– La oportunidad de mejorar la marca de la carne uruguaya. Creo que hay cosas que tenemos que hacer, como negociar los aranceles, seguir negociando los mercados, pero después tenemos que a nuestra carne darle un salto de calidad en cuanto a marca y marketing.
Te voy a poner un ejemplo. En China, Australia en carne es la marca top. Al chino, le hablás de carne australiana y dice calidad. Y el chino ya sabe cómo comprarla y confía en eso y paga más por esa carne. Entonces tenemos, mucho más que en el volumen, la posibilidad de crecer en el valor. Hay un desafío ahí de posicionar marcas e INAC hace un año y medio unió la marca de la carne con la marca uruguaya. Es Uruguay Meats. Primero que sepan dónde es Uruguay. Antes alcanzaba con que era del Río de la Plata. Nos escondíamos atrás un poco del prestigio de la carne argentina. Queremos que lo conozca el consumidor, que lo pida el consumidor y que lo elija, aunque sea más caro. Ese es un poco el desafío y ahí tenemos bastante para crecer en valores.