El expresidente del Banco Central del Uruguay y asesor económico del Partido Colorado planteó la eliminación del instrumento de deuda.
El expresidente del Banco Central del Uruguay (BCU) y actual asesor económico del Partido Colorado (PC), Julio de Brun, advirtió que las Letras de Regulación Monetaria (LRM) mantienen artificialmente la demanda de moneda nacional pagando interés, generando «un tipo de cambio de equilibrio más apreciado».
El contador público y economista colorado sostuvo en radio 970 Universal que esta visión es compartida por el resto del equipo económico de la fuerza política y que por ello está planteada la eliminación de las LRM en el programa de gobierno del candidato presidencial Andrés Ojeda.
«Nosotros las usamos intensamente en el año 2002 y 2003 para sustituir lo que era la huida de la moneda nacional, se hablaba de un tipo de cambio de 50 pesos, de hiperinflación, entonces, la forma de convencer a la gente de conservar la moneda nacional era pagarle por ello», rememoró De Brun.
«De esa manera (se) generó una demanda de moneda nacional que permitió abortar lo que era en aquel momento una crisis cambiaria«, adicionó el exjerarca. «En los años siguientes, ya sin esa presión, Uruguay siguió por ese camino de seguir expandiendo el balance del Banco Central, comprando reservas internacionales, pero financiadas con esta expansión de las Letras de Regulación Monetaria», continuó.
De Brun indicó que Uruguay entre 2003 y 2004 tenía una base monetaria en torno al 4% o 5% del producto, mientras que hoy «eso se ha triplicado». «Los pasivos del Banco Central han crecido en Uruguay al mismo ritmo de lo que han crecido los de la Reserva Federal de los Estados Unidos«, comentó.
«Entramos en una carrera entre el BCU y la Fed»
«Hemos entrado en una carrera entre el Banco Central del Uruguay y el banco central de Estados Unidos en defensa e impulso del uso de nuestra moneda con la diferencia de que Estados Unidos ha pagado tasa 0 de intereses en esos momentos y ha sido una demanda natural del público por una moneda de refugio, y Uruguay lo ha hecho pagando intereses», valoró De Brun.
El asesor colorado entiende que esta dinámica de competencia contra un dólar que se fortaleció en la última década, generó un efecto artificial en la fortaleza del peso uruguayo. «Eso está detrás de nuestra idea, de decir ‘vamos a una demanda más legítima, más natural de la moneda nacional’ sustituyendo el uso de las Letras de Regulación Monetaria por un instrumento más genuino de financiamiento de las necesidades del sector», dijo en referencia al acusado atraso cambiario en el país por parte de los sectores productivos.