Pérdidas en Ancap: las razones detrás del resultado negativo

Mientras las chimeneas de La Teja vuelven a encenderse, la petrolera estatal presentó pérdidas por 48 millones de dólares en los primeros tres meses del año.

La Administración Nacional de Combustible, Alcohol y Portland (Ancap) registró pérdidas por 48 millones de dólares durante el primer trimestre del año, un desempeño a contramano del que la petrolera estatal de Uruguay venía teniendo en los trimestres previos. Entre los motivos de este resultado, la importación de combustibles por encima de lo estipulado inicialmente por la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea), así como la demora en las tareas de mantenimiento en La Teja fueron claves.

Ancap viene importando combustible desde el 4 de setiembre, cuando las chimeneas de La Teja se apagaron para comenzar con las tareas de mantenimiento programadas —que se demoraron algunas semanas más en medio del conflicto con el sindicato. Desde entonces —y hasta el 30 de abril—, las compras de nafta y gasoil para abastecer la demanda interna totalizaron un monto de 11,11 millones de dólares más al que surgía del Precio de Paridad de Importación (PPI) elaborado por la Ursea.

Este desfasaje entre lo proyectado y el costo real de las importaciones de combustible fue una de las razones del resultado negativo del trimestre; aunque también la parada de la refinería contribuyó a estas cifras, no solo por los costos de las taras sino también por la pérdida de las importantes ganancias que venía teniendo la petrolera estatal.

Los costos de la parada técnica

La parada implicó una facturación a contratistas por 72 millones de dólares, con 1.200 trabajadores contratados y 438 de Ancap. La petrolera estatal estimó que se importaron 1.630.000 metros cúbicos en productos como gasoil, gasolinas, supergás, propano, fuel y jet A1 para satisfacer la demanda.

Según explicó el presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic esto se traduce en 10 millones de barriles de productos ya refinados, cuando el país por año importa 16 millones de barriles de crudo para refinar en La Teja.

La parada tuvo una duración real de 276 días, influidos por las tareas previas no realizados, demoras por lluvia, licencia de construcción y otros imprevistos que multiplicaron los costos inicialmente estimados. A esto, además, se le sumaron las dificultades logísticas que supusieron el ingreso y traslado de los barriles desde el Puerto de Montevideo.

Otro factor a tener en cuenta es el subsidio en el supergás, vigente desde 2022 para los hogares de menores recursos y que, en mayo, alcanzó a 123.000 hogares. Esto corresponde a un costo de 9,6 millones de dólares en los últimos cinco meses. Igualmente, el producto también está subsidiado para el público general, ya que su precio de venta está por debajo del PPI que estima la Ursea. Esta diferencia implicó un costo de 14 millones de dólares este año hasta mayo, mientras que en 2023 fue de 34 millones de dólares.